Cuando usted se vuelve creyente, usted es colocado en Cristo, Cristo llega a vivir en usted, usted recibe toda bendición espiritual en los lugares celestiales, tiene todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad; y usted está completo en Él. Posicionalmente, todo está cubierto. Entonces, el crecimiento espiritual no es cuestión de su posición en Cristo.